El futuro de nuestras iglesias no depende de la cantidad de convertidos sino de la madurez espiritual que logra cada miembro. Por eso es necesario que cada iglesia tenga un buen programa de educación cristiana para preparar a sus miembros, dándoles un conocimiento teórico y práctico de la Palabra de Dios. En Cómo enseñar con eficacia encontrará ideas creativas para una dinámica enseñanza dominical.